Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son enfermedades que se transmiten al tener relaciones sexuales con otras personas infectadas por diversas bacterias, virus, hongos y artrópodos que pueden desarrollarse o vivir en los fluidos corporales. Aunque suelen afectar a los órganos genitales, muchas de ellas afectan también a otros órganos.
Aunque la mayor parte de las ETS tienen un tratamiento con el que se pueden curar, es necesario tomar las medidas necesarias para evitar el contagio.
Las principales enfermedades de transmisión sexual
Las enfermedades de transmisión sexual son muy frecuentes y cada vez es mayor el número de personas afectadas debido a varias causas:
- Existencia de una mayor libertad en las relaciones sexuales.
- No usar preservativos en las relaciones sexuales (la promiscuidad en sí misma no tiene por qué favorecer el contagio, ya que puedes tener una sola pareja y si no usas preservativo puede transmitirte una ETS).
- Pérdida de miedo a la muerte por SIDA. Antes, contraer el VIH era sinónimo de muerte, pero con los avances en los fármacos antirretrovirales ha aumentado mucho la esperanza y calidad de vida de los enfermos, con lo que han bajado las precauciones.
- El abuso de antibióticos ha generado microorganismos resistentes.
Las principales enfermedades de transmisión sexual son: